jueves, 29 de julio de 2010

Otra comidilla ...


...fragmento de "Una Cena" de Baltasar del Alcázar

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Por Nuestro Señor, que es mina
la taberna de Alcocer:
grande consuelo es tener
la taberna por vecina.

Si es o no invención moderna,
vive Dios que no lo sé,
pero delicada fue
la invención de la taberna.

Porque allí llego sediento,
pido vino de lo nuevo,
mídenlo, dánmelo, bebo,
págolo y voyme contento.

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POLLO CON CHOCOLATE

Ingredientes:

1 Pollo entero, 1 nuez de queso (Filadelfia, San Millán, etc.), 1 nuez de mantequilla, 3 cucharadas de cacao amargo, 2 cucharadas de harina, caldo de ave, sal, pimienta y aceite de oliva.

Elaboración:

Se mezcla el queso, mantequilla y 1 cucharada de cacao, amasándolo bien hasta que quede una bola de color uniforme. Se mete dentro del pollo, se salpimenta, se embrida y se asa en el horno.

Mientras se hace, preparamos la salsa: en una sartén ponemos 2 cucharadas de aceite y, cuando esté caliente, añadimos la harina y el resto de cacao. Removemos y vamos incorporando caldo hasta obtener una crema ligera.

Cuando el pollo está asado, lo despiezamos y lo ponemos con la salsa. Añadimos también el jugo que soltó (previamente desgrasado) y lo cocemos a fuego lento durante 5 minutos teniendo cuidado de mover la salsa para que no se pegue.

Se sirve caliente y se puede acompañar de arroz blanco.


miércoles, 14 de julio de 2010

La carpintería ...

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Hace unos años, visité el taller de José Ortiz (Cuaderna Maestra) y me regaló un trozo de madera de un tablón extraño que tenía por allí (que resultó ser wengué, pero entonces no lo sabíamos).




Yo en aquel momento no tenía ni idea de lo que podría hacer con ella, pero era una madera con una veta y contraveta muy interesantes, además de un color oscuro excelente para combinar con la plata, así que me puse manos a la obra con idea de hacer una colección de sortijas cuadradas.




En principio sólo utilicé madera y plata, pero después me animé a incluir alguna piedra (circonitas).


Después hice algunos experimentos con madera de olivo, boj y ébano y, la verdad es que no quedaron mal, pero no sé si será porque los de wengué fueron los primeros, que para mi, tienen un encanto especial.




Todavía me queda un trozo de madera, así que quizá debería hacer algunas piezas que no sean sortijas (pendientes, colgantes, alguna pulsera) ... pero eso es otra historia.